Pamplona ha vivido una de las cabalgatas de Reyes Magos más lluviosas que se recuerde en los últimos años, marcada desde primera hora de la tarde por las intensas precipitaciones que han tenido lugar en la capital navarra.

Ya desde la entrada de los Reyes Magos de Oriente, junto a su colorida comitiva de abanderados italianos, en Pamplona por el Puente de la Magdalena el devenir de la cabalgata se ha visto afectado por la lluvia. Así, sus majestades han aparecido en la ciudad con quince minutos de retrasos sin poder evitar, pese a su carácter de magos, que el agua trastocara sus planes.

En torno a las 16.15 horas, Melchor, Gaspar y Baltasar, montados en sus dromedarios, llamados Romeo, Niño y Pesao, han cruzado el río Arga por el Puente de la Magdalena y han entrado en la ciudad acompañados por cientos de personas que han coreado sus nombres y les han transmitido su cariño por su llegada, un año más, a Pamplona.

En su entrada en la ciudad, los Reyes Magos han recorrido las calles del Casco Viejo con un vistoso cortejo, precedido por figurantes que han ido anunciando su llegada. Además, pastores y músicos cantores les han acompañado hasta el Portal de Francia, en cuyas inmediaciones estaba el campamento de la guardia pretoriana, que se ha sumado al cortejo.

De esta forma, los Reyes Magos han cruzado el puente levadizo del Portal de Francia, una de las seis puertas de acceso que tenía la antigua ciudad amurallada, y que estuvo en desuso durante 95 años. En 2007, sus engranajes fueron restaurados para bajar una puerta que permite la entrada a Pamplona de los Reyes Magos en las horas previas a esa noche mágica en la que reparten regalos a niños y mayores.

La puerta, con un peso de 1.824 kilos, permanecerá el resto del año bloqueada con pasadores y candados hasta que nuevamente, el próximo 5 de enero, sea utilizada para dar la bienvenida a los Magos de Oriente.

El repique de todas las campanas de la catedral y de las iglesias del Casco Antiguo de Pamplona ha anunciado al unísono la llegada de los Reyes Magos, que se han dirigido a la Plaza Consistorial, donde han sido recibidos en el zaguán del Ayuntamiento por el alcalde de Pamplona, Joseba Asiron, y otros miembros de la corporación municipal.

LA LLUVIA TRASTOCA UNO DE LOS EVENTOS HABITULES

Como otros años, estaba preparado en la plaza consistorial un gran escenario, pero, debido a la lluvia, los Reyes Magos han saludado a las personas congregadas en la plaza desde uno de los balcones del Ayuntamiento.

«Vuestra alegría nos ha contagiado de una energía positiva y vamos a estar dispuestos a trabajar toda la noche y vais a ver la mejor cabalgata del siglo«, han afirmado los Reyes Magos.

Tras ser recibidos en la plaza consistorial, sus Majestades de Oriente se han dirigido a la Casa de Misericordia de Pamplona, donde han llevado la alegría y emoción de la Navidad a los residentes. Desde allí, se han dirigido a la calle Abejeras para a partir de las 19.00 horas iniciar la cabalgata, que también se ha desarrollado bajo una intensa lluvia.

Este año, más de 1.000 personas han integrado el cortejo de los Reyes Magos en su recorrido en la cabalgata, en la que, como principal novedad, figura la carroza de la Estrella de Belén y durante los 2.200 metros del recorrido se han repartido unas tres toneladas de gominolas de sabores entre niños y adultos.