Nació en 1924, vivió la guerra civil siendo adolescente, y la juventud en plena posguerra franquista, hasta la llegada de la democracia, en su Pamplona natal. Ahora, ha cumplido 100 años y lo ha celebrado con una visita a la Casa Consistorial. Tere San Román Asín ha acudido al Ayuntamiento acompañada por familiares y amigos, donde ha sido reconocida con un ramo de flores, un pañuelo y un pin de la ciudad.

Tere ha vivido en la calle San Nicolás, en la calle Amaya junto a la plaza de toros y actualmente reside en Azpilagaña, aunque visita a menudo el Casco Antiguo.

Trabajó desde muy joven en un taller de la calle Amaya en el que cortaba y cosía zapatos, junto a su madre, su padre y sus tías; tiempo después también lo harían para la fábrica de López. En el año 1950 contrajo matrimonio con Felipe Rojo, muy conocido en la ciudad en el ámbito de la pelota; de hecho, puso en marcha una escuela de pelota. Tuvieron cinco hijas, de las que viven cuatro, y han tenido tres nietas y tres nietos.

La centenaria es una persona muy familiar, que disfruta de tener cerca a sus hijas y a sus amistades. Le gustan las reuniones familiares y las veladas con sus amigas, y está pendiente de su entorno, siempre ha cuidado de las personas próximas. Entre sus aficiones se encuentran la historia, la geografía, el cine, las exposiciones, la lectura o el folklore local. También disfruta mucho la gastronomía, ya que es de buen comer y buen vivir en general.

Es una persona que está al día de la situación cultural, social y política; de hecho, no se pierde un telediario ni un debate político, aunque lo prefiere por la radio, porque dice que cuentan más y mejor. Tere San Román es una señora coqueta y cuida su ropa, su peinado, y no le gusta que le pregunten por su edad: si le preguntan por sus años, contesta que tiene 20. Vitalidad no le falta, pues con cada hija realiza diferentes actividades: visitar otros barrios y ver cómo van cambiando, tomar el vermú, pasear por calles, jardines, etc. 

Ha viajado en presencia y «por folleto», ahora más por televisión, porque dice que es muy cómodo. Siempre le han gustado y actualmente también disfruta con las excursiones a diferentes rincones de Navarra y si puede ser con festejo, aún mejor. Le gusta estar con gente joven porque le aporta cosas nuevas. Es una persona positiva, con mucho ánimo, alegre, con sentido del humor, incluso con picardía, tiene una gran fuerza de voluntad y hace todo lo posible por hacer la vida más fácil a sus hijas. De vez en cuando, también tiene su genio. Acude tres días a la semana al centro Adacen, donde entre otras cosas se entretiene con la tablet.