Abaurrea advierte que revisarán y regularizarán las relaciones de Pamplona con la Iglesia
El concejal delegado del área de Gobierno Estratégico, Urbanismo, Vivienda y Agenda 2030 del Ayuntamiento de Pamplona, José Abaurrea, ha señalado que «tendremos una reflexión para analizar, regularizar y establecer las relaciones que, como Gobierno municipal, queremos tener con las diferentes expresiones religiosas o culturales o de otro tipo, para que sepamos exactamente qué es lo que quiere hacer el Ayuntamiento, cómo quiere relacionarse y cómo se va a desenvolver en el futuro«.
Así lo ha indicado este lunes, durante una rueda de prensa, en respuesta a los medios de comunicación sobre la financiación de las hierbas lanzadas por operarios municipales durante la procesión del Corpus Christi de este domingo en Pamplona.
Tras explicar que «el abono lo hará el Ayuntamiento«, Abaurrea ha señalado que «la forma en que se venía desarrollando el tema de las hierbas en relación al Corpus no tenía amparo legal«. «De hecho, en una ocasión Enrique Maya -exalcalde de Pamplona- dijo ‘se van a echar porque lo quiere la ciudad’ y luego el Tribunal Administrativo de Navarra determinó que efectivamente se había hecho de manera irregular y en contra de la normativa de contratos», ha remarcado, tras añadir que «se hizo después un convenio para darle amparo» pero «lo que nos hemos encontrado es que ese convenio estaba caducado y por lo tanto no había respaldo».
«Lo que hemos querido hacer son dos cosas: una, resolver una situación sobrevenida y que no era de satisfacción de ninguna de las partes -queremos ser una ciudad de la convivencia y que no se entienda que hay un animadversión especial con algún acto en concreto, todo el mundo tiene que tener libertad plena para desarrollar sus actuaciones-. Pero también queríamos someternos a los procesos legales y contractuales», ha manifestado.
Por lo tanto, ha comentado que «este año hemos dado una solución de urgencia con amparo» y «en conversación con el propio Arzobispado». Sin embargo, ha apuntado que «tendremos más adelante una reflexión para analizar, regularizar y establecer las relaciones que, como Gobierno municipal, queremos tener con las diferentes expresiones religiosas o culturales o de otro tipo, para que sepamos exactamente qué es lo que quiere hacer el Ayuntamiento, cómo quiere relacionarse y cómo se va a desenvolver en el futuro».
«Esta ha sido una salida, por resolver de la manera más amable posible esta situación, pero trabajaremos de aquí a futuro para que todo esto tenga una forma lógica, razonable y sensata de organizarse», ha apuntado.